Pues sí, parece que no iba a llegar este año, pero ya está aquí, el temido frío ha llegado a Cuenca, y con él, una sensación de tristeza y desgana que invita a no salir de casa, hasta que vuelva la primavera, ¿o no? ¡Ánimo!, no es para tanto, es cierto que nos cuesta unos días el acostumbrarnos a las bajas temperaturas invernales, pero una vez superado este paso, el frío nos aporta infinidad de beneficios:
Nos mantiene jóvenes
Según estudios llevados a cabo por la Universidad de Michigan en gusanos, aquellos que vivían expuestos a temperaturas y climas fríos desarrollaban una mejor adaptación y una respuesta genética que les hacia vivir más años, ello unido a las conclusiones de otro de sus estudios, que determina que la naturaleza tiene un efecto calmante y regenerativo en las personas, nos ánima a salir al campo incluso en épocas frías, para mantenernos más jóvenes.
Mejora la calidad del aire
Sin duda, la presencia de lluvias de la época fría ayuda a limpiar el aire, sobre todo en entornos urbanos, además, las bajas temperatura ayudan a que la calidad del aire sea mucho mejor, eliminando los altos niveles de ozono que este contiene en temporadas cálidas, de manera que, el invierno, también es un buen momento para pasear por el bosque y respirar aire de buena calidad para oxigenar nuestros pulmones.
Combate las infecciones
Según la Dra. Rachel C. Vreeman, co-autora de “No te tragues el chicle: Mitos, medias verdades y mentiras sobre tu cuerpo y salud”, la exposición a temperaturas frías, provoca que las células que ayudan a combatir las infecciones en nuestro cuerpo aumenten, provocando una recuperación mucho más rápida de las mismas.
Nos permite estar más activos
Las temperaturas frías, provocan en el cuerpo un aumento en la cantidad de energía, por lo que, al exponernos a climas fríos estaremos más despiertos y activos, además está comprobado que las temperaturas cálidas agotan recursos como la glucosa, utilizada en los procesos mentales, de manera que en invierno nos sentiremos más ágiles física y mentalmente.
Reduce o elimina algunos insectos
Entre ellos, la oruga procesionaria (Thaumetopoea pityocampa), que a día de hoy se encuentran en elevadas cantidades en los pinos de la provincia de Cuenca. Está comprobado que las temporadas de grandes lluvias y temperaturas bajas, acaban matándolas, algo necesario, ya que, si se mantienen las temperaturas cálidas, acabaran defoliando a un gran numero de pinos, también algunos mosquitos portadores de enfermedades y garrapatas no sobreviven a bajas temperaturas.
Ahora no tienes excusa, salir al bosque en invierno tiene gran cantidad de beneficios, además de la posibilidad de observar paisajes únicos con niebla, hielo y nieve. En EcoExperience ofrecemos cualquiera de nuestras Experiencias también en invierno, así que, no dudes en abrigarte, contactar con nosotros y prepararte para vivir un gran día al fresco.